Este año los Reyes Magos tienen una petición especial para los más pequeños del hogar, ya que han hecho algunos cambios en su recepción, y ya no van a recibir cartas que lleguen en globo.
La noche del 5 de enero sin duda es una de la noches más esperadas y mágicas, para cientos de niñas y niños mexicanos, pues es la noche que llegan Melchor, Gaspar y Baltazar, con peticiones especiales.
Sin embargo en las últimas décadas se ha utilizado como método de envío amarrar la carta escrita por los pequeños, a un globo de látex relleno de gas helio, el cual hace que el globo se eleve por los cielos y en apariencia llegue más rápido con los Reyes Magos.
Pero esto no es así, ya que el globo tiende a elevarse unos metros y al ser arrastrado por el aire, termina desinflado en ríos, mares y bosques, donde atenta contra la vida animal y natural del planeta, convirtiéndose en una de las mensajerías más contaminantes y peligrosas con efectos altamente negativos en el ecosistema.
No se trata de cualquier basura ya que un globo como estos, mismo que efectivamente se ve muy lindo por los cielos, tarda hasta 450 años en degradarse, claro en el mejor de los casos, porque de otra manera los animales marinos tienden a confundirlos con comida, consumirlos y morir.
Así que los Reyes se han dedicado a hacer ciertas investigaciones, y es por ello que invitan a las niñas y niños a dejar su carta dentro de su zapato, llevarla al correo, colgarla en el árbol de navidad, pegarla detrás de la puerta, o cualquier otra idea que no implique el sacrificio o sufrimiento de otros seres.
Zaira Montoya/ Sociales 3.0
