El 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer, sin embargo, debido a la poca información que la gente tiene al respecto, causa, y cierta confusión, llegan decenas de felicitaciones, de tal manera que es sumamente necesario y urgente que se recuerden los esfuerzos de las mujeres artistas y trabajadoras por mantenerse presentes en todas las áreas de formación profesional y de libre expresión, como lo es la maestra de danzas tradicionales y autóctonas, Dolores Zúñiga, quien mediante su esfuerzo continuo ha llevado el folclór y tradiciones de Querétaro a todo el mundo, y sin duda es una gran inspiración de perseverancia, talento y lucha constante al hacer sonar sus pasos.
“La danza es el lenguaje secreto del alma”
-Martha Graham.
De tal manera que nos comparte cuál es su principal motor como bailarina para seguir adelante y continuar llevando el arte, color y folclór mexicano a todos los rincones posibles “Soy bailarina porque me apasiona representar a las mujeres de cada región en el escenario. Soy bailarina porque desde niña se me inculcó el amor a la danza”.
“No me inspira una bailarina en especial. Creo que ha habido grandes mujeres mexicanas que han sobresalido en la danza y nos han dejado grandes escuelas y ejemplos, las hermanas Campobello, Amalia Hernández, Guillermina Bravo, por mencionar algunas. Un gran ejemplo para mí ha sido la maestra Aurora Zuñiga, quien nos ha enseñado a profundizar en nuestros pueblos y sus tradiciones, y a tener esa cercanía con la gente que preserva y mantiene vivas nuestras fiestas, música, gastronomía, artesanías, etcétera”, aseveró.
Le preguntamos cuál sería su postura si en algún momento les prohibieran seguir bailando, continuar representando la libertad de la mujer a través de la danza, a lo que respondió: “Creo que siempre me mantendría en pie de lucha para seguir bailando. Si me lo prohibieran por ser mujer, no lo admitiría, creo que ya en el pasado no han restringido muchas cosas y no estaría dispuesta a dar un paso atrás”.
“La danza es muy importante porque además de ser una de las bellas artes, ayuda a formar mejores seres humanos, sensibles a su entorno, y abiertos al conocimiento”, compartió.
También nos compartió cómo se prepara para salir al escenario y cuál es la magia que corre por su cuerpo antes de cada presentación: “Cuando bailo me gusta preparar mi cuerpo con algún calentamiento, cerrar los ojos para dar un breve repaso de lo que voy a hacer y me gusta abrazar a mis alumnos y compañeros, deseando en el escenario, cuando ya estoy arriba del escenario me siento totalmente libre, feliz y entrego lo mejor de mi. Quiero contar historias reales o ficticias, que el espectador se sienta en algún momento identificado, conmovido, motivado, alegre”.
Y finalizó con un mensaje contundente y motivador para las mujeres: “Es importantísimo que las mujeres le demos vida al escenario, normalmente somos mayoría y tenemos todo el derecho a expresarnos por medio de la danza”.
Zaira Montoya/Sociales 3.0