Ciudad de México, 26 julio de 2021.- Alejandra Guzmán reveló cuántas operaciones se ha realizado, emanado del daño que causaron cirugías estéticas en ella, pues aseguró que pasó por temporadas donde se sintió muy mal de salud debido a lo agresivas que son algunas de ellas, pero que actualmente se siente mucho mejor.
En entrevista con Yordi Rosado a través de YouTube, la cantante reveló los efectos que han tenido los polímeros en su cuerpo, y todos los daños que le causaron.
“Ha sido una lucha muy dura, muy larga, en la cual he aprendido las curvas, las rectas y todo. Tengo una doctora en este momento que es la que mejor me ha operado sin ser tan agresiva, tan abrasiva; pero yo cuando empezó esto era el 2012, estaba cantando con Moderatto en esa época, yo salía con unas alotas y apenas con mi cadera de titianio, que ya la tenía nueva, empezaba a darme cuenta de que no estaba bien de la salud”, contó.
Revela que radicaba en Londres, cuidad en la que estaba grabando un álbum musical, sufría constantemente de fiebre por las noches, además de que la piel se le ponía negra y dura.
“El plástico no dejaba, permitía que dejara pegar mi piel con mi piel, porque había plástico”. La artista revela que sentía desesperación, ya que tenía que cambiar constantemente de médico porque había veces en las que ya no sabían qué hacer con ella.
“Yo firmé de ‘órale, hagan experimentos conmigo, no los voy a acusar si muero ni nada’ (…). Uno de ellos me dijo ‘qué pantalones tienes’, y yo le dije ‘sí, señor porque quiero vivir’, y estuve seis meses ahí dentro. Seis meses con un sistema back que hace como una frecuencia y te empieza a sacar como más piel por dentro; pero tenía una herida de 27 centímetros”, cuenta.
La actriz revela que no ha tenido que detener sus actividades personales ni su carrera personal por las dificultades de salud que le han ocasionado sus cirugías, pero que debido a ello, la tienen que operar prácticamente cada año, y reveló que ya han operado más de 40 veces.
“Yo ya no me siento mal, siento que mi cuerpo ya no tiene casi nada, porque me han rebanado una tras otra; pero amo mis cicatrices, amo sentirme bien y ahora creo que me acepto más que antes, me quiero más que antes, me cuido más que antes”, asegura.
Pero regresar a sentirse bien no fue una tarea sencilla, pues ella misma revela una desgarradora anécdota de cómo salió del hospital en un momento en el que pensó que ya no podía más. “Una vez le hablé a mi papá (…). Y le dije ‘papi, yo ya quiero tirar la toalla, ya estoy cansada’, yo ya pintaba con mi sangre. Me estaba volviendo medio loca (…). Y me dice ‘nada más quiero que saludes a mi amigo’ y me pone al público, y haz de cuenta que entraba vida por mis oídos y salí del hospital…”, relató.
Ahora admite que su vida es luminosa, y que actualmente disfruta su vida mucho más que antes.
“Creo que en esta etapa en mi vida, disfruto más la ida que antes; antes era más reventón, más locura, y ahora me guardo, casi no salgo (…) he cambiado todo: mi vida, mis costumbres, mis amigos, mis horarios”, aceptó.
Con información de Milenio.