Uno de los recintos más importantes a nivel nacional, si no es que el más importante, es sin duda el Auditorio Nacional, considerado como el “Coloso” de Reforma.
Ha permanecido cerrado por más de dos años y medio, y en este tiempo ha sufrido un cambio de piel, una mejora sustancial en su acústica, de por sí ya aclamada.
Se busca cumplir con las expectativas de un foro de clase mundial. Por lo que además ha renovado su sistema de iluminación y pantallas.
El sistema de audio, ahora está compuesto por 144 bocinas con la más avanzada tecnología, para ofrecer un sonido envolvente, y privilegiado para cualquier butaca.
Pero este sistema no está limitado solo a su foro principal, si no que también se implementó una mejora en el Lunario, con un total de 50 bocinas con la misma tecnología.
Dicho sistema tiene el referente de ser usado en eventos como los juegos olímpicos.
A su vez las pantallas a los costados del escenario, arriba de la zona de balcones se han reemplazado por unas 4k de última generación, con bajo consumo de tecnología.
Y el sistema de iluminación ahora será RGBW, para brindar una capacidad diversa cromática, de diversas intensidades, con tecnología LED.
Fabricado por una marca global experta en ingeniería y robótica, sus 250 luminarias brindan una mejor visibilidad al público que ingresa para ubicar su butaca. El sistema aporta una transición de luz adecuada y segura para los espectadores, desde que el espectáculo concluye hasta que desalojan del foro. Su bajo consumo energético es amigable con el medio ambiente y permite una temperatura más agradable al interior de la sala.
Ángel Rodríguez/Sociales 3.0
