“La realidad supera a la ficción” suena a frase manida, pero lo cierto es que hay biografías que dejan en nada a cualquier idea nacida de la imaginación. Hoy en Librotea repasamos biografías y novelas biográficas para confeccionar una estantería con vidas que enganchan más que cualquier ficción.
Emmanuel Carrère es un maestro de este género que nada a medio camino entre el periodismo y la biografía novelada. El libro del escritor francés sobre el peculiar Eduard Limónov, un poeta, un golpista, un recluso… es uno de los más aplaudidos de la literatura europea de los últimos años. Elena Poniatowska enhebra la existencia de la pintora surrealista Leonora Carrington en las páginas de Leonora. La propia artista inglesa vertió parte de su existencia en Memorias de abajo, un título en el que se mezclan su encuentro con Marx Ernst, su huida a España o su traumático paso por un sanatorio mental en Santander.
Stefan Zweig, autor de otras biografías notables como la de María Antonieta, escoge a un oscuro actor secundario de la Francia revolucionaria. David Foenkinos revisita la trágica historia de la pintora Charlotte Salomon en una novela titulada con el nombre de pila de la artista, asesinada en el campo de concentración de Auschwitz. Jessica Mitford, Decca para sus allegados, es una de las hijas del Barón de Redesdale. Miembro de una de las familias aristocráticas británicas más famosa de la década de los treinta y los cuarenta del siglo pasado… Hermana de la duquesa de Devonshire o de la escritora Nancy Mitford, narra en las páginas de Nobles y rebeldes la peculiar infancia que vivió en el seno de su más que peculiar familia.